domingo, octubre 11, 2009
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Reedición de la vieja maldición. Comentarios subjetivos sobre el mundo que nos rodea. "No te imagines que los demás tienen tanto interés en escucharte como el que tú tienes de hablar" —Antístenes.
Publicado por Unknown @ 10/11/2009 10:11:00 a. m.
Etiquetas: etiquetas, política, recursividad
4 Comentarios:
¡Viva la monarquía absoluta de mi cama! (La haría república, pero me han dicho que se necesita más de una persona).
El hombre libre es preso de su cuerpo, como ser, es preso además de su barrio, localidad, comarca, provincia, ... Quizás el más nacionalista de todos es aquel que lucha por sí mismo, por escapar primero de su cabeza ...
Lo demás, recursividades aparte, son escalones que nos llevan al nacionalismo planetario, galáctico y cósmico.
Pero esto no puede salir en la TV, claro :)
Saludos!!
M@k mírate el comentario de AlyCie a Sinónimo, que a lo mejor cambias de opinión.
n4rk0 incluso cuando consigues escapar de todo sigues siendo preso del concepto "libertad". Quizás ese concepto no sea más que una paradoja.
Pero de todas formas opino que merece la pena el camino hacia el mismo... y además le tengo una manía horrorosa a las etiquetas en general y al nacionalismo en particular. ¿Se nota mucho?
El nacionalismo sostiene privilegios ... ¡por razón de la cuna! Así que los republicanos nacionalistos, no son mas que un quiero y no puedo, bastante triste.
No me extraña querido Telémaco, que esa etiqueta no sea autoadhesiva, sino autorrepulsiva y que sólo pueda colocarse con clavos, chinchetas o grapas.
¡Cómo te entiendo!
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