viernes, marzo 11, 2011
Subscribirse:
Enviar comentarios (Atom)
skip to main |
skip to sidebar
Algunos derechos reservados. Este sitio está protegido bajo la licencia Creative Commons Attribution 2.5 License
Reedición de la vieja maldición. Comentarios subjetivos sobre el mundo que nos rodea. "No te imagines que los demás tienen tanto interés en escucharte como el que tú tienes de hablar" —Antístenes.
Acerca de mi
- Unknown
Búsqueda
Enlaces recomendados
Escriben mis amigos
Enlazan aquí
Últimos comentarios
Últimos artículos
Archivos
Etiquetas
Sindicación de contenidos
site feed (Atom)
![[Valid Atom]](http://photos1.blogger.com/blogger2/4894/1707/320/bar_valid-atom3.jpg "Validate my Atom feed"){kind=small}
Contador FeedBurner
Algunos derechos reservados. Este sitio está protegido bajo la licencia Creative Commons Attribution 2.5 License
6 Comentarios:
Sería como si el tiempo, al avanzar despedazado en mil relojes, decidiera que la única forma de volver a intentarlo es comenzar de nuevo. Y los fragmentos de tiempo que transcurren en cada intento son sólo tienen sentido en cada reloj. Nada cambia porque cada parte se mueve.
Aquel caballo rojo...No tenía jinete.
No tenía bridas ni estribos.
No sabía adónde iba.
No sabía por qué incendiaba
los bosques a su paso.
Sólo de una cosa estaba seguro:
de que era caballo.
Precioso recurso recursivo analógico-digital.
Los relojes análogicos se someten a la dictadura de la hora digital, avanzando sin lógica para cumplir un objetivo. Me ha recordado a las organizaciones: Los relojes análogicos son los curritos y los digitales los estrategas.
Alguién se subió a a la cintura del reloj de arena...Y el tiempo cesó.
Haz un comentario