La rana vieja
Un grupo de ranas viajaba por el bosque, cuando de repente dos de ellas, una jovencita y la otra una rana vieja, cayeron en un pozo profundo. Las demás ranas se reunieron alrededor del agujero y, cuando vieron lo hondo que era, empezaron a comentar la mala suerte que habían tenido y lo inútil de esforzarse para liberar a sus compañeras.
Sin embargo, las dos ranas seguían tratando desesperadamente de salir del hoyo con todas sus fuerzas. Mientras, las otras les gritaban que sus esfuerzos serían inútiles, que se abandonasen y esperasen pacientemente la muerte.
Finalmente, una de las ranas atendió a lo que las demás decían, se dio por vencida y murió. Pero la otra continuó saltando y saltando, con tanto esfuerzo como le era posible.
Mientras más saltaba y se esforzaba, más gritos de desánimo y desaliento le dedicaba sus compañeras. Pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente consiguió dar un increíble salto y salió del hoyo. Las otras ranas asombradas la felicitaron efusivamente por su hazaña.
Y la rana vieja y sorda dijo:
"Muchas gracias a todas, porque sin vuestra ayuda no lo hubiese conseguido. El ver como me gritabais animándome con tanto entusiasmo, me dio la fuerza necesaria para conseguir salir del pozo. Y os agradezco de todo corazón que hayáis confiado en mí y me hayáis animado con tanta fuerza“
4 Comentarios:
Muy bueno!!! A palabras necias, oidos sordos.
Preciosa Fábula.!!!
¡Teletrasportación ya!
anónimo oidos sordos, o mejor aún echarle creatividad y conseguir darles la vuelta.
el taller de Curra-Cartonnage ne alegro que te haya gustado.
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