viernes, mayo 22, 2009

crisis: solución recursiva



En una pequeña ciudad todos tienen deudas y viven a base de créditos.

Un buen día llega a la ciudad un forastero y entra en un pequeño hotel con encanto. Pide una habitación, y la recepcionista le pide una T-Visa o 100 euros como garantía o fianza, y el forastero entrega un billete de 100 euros.

El jefe del hotel agarra el billete y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero.

Este coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos.

El gorrinero a su vez se da prisa a pagar lo que le debe al proveedor de pienso para animales.

El proveedor coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta a la que hace tiempo que le debe un servicio. (Cómo será la crisis, que hasta la prostituta ofrece servicios a crédito).

La prostituta coge el billete y sale para el pequeño hotel donde debía la habitación de los últimos trabajos a algunos de sus clientes.

En este momento baja el forastero, que dice que no le convence la habitación, recupera el billete y se va de la ciudad.

Nadie ha ganado un duro, pero ahora toda la ciudad vive sin deudas y mira el futuro con confianza.

via -> El pito doble

9 Comentarios:

Zhalim dijo ...

Hay que ver lo que gana la sociedad eliminando de ella los préstamos sin interés.

Antonio dijo ...

Yo quiero al menos uno de ésos.

Fernando García Pañeda dijo ...

Muy bueno e ingenioso :)
Pero yo creo más bien que ahí estaba el germen de la crisis.
En cuanto uno de ellos tiene un imprevisto y necesita más crédito, se van todos al fondo.

Unknown dijo ...

Zhalim en la antigua India estaba prohibido prestar a interés. Platón, Aristóteles, Catón, Cicerón, Séneca y Plutarco condenaron la usura. La iglesia católica prohibio los intereses. Carlomagno declaro la usura delito. El Islam y el judaismo también lo prohiben.

¿Porqué lo harían?

Antonio mejor una buena novia ;)

Fernando tienes razón, el bucle puede girar en los dos sentidos, detrás de todo esto no está más que el arquetipo sistémico de la escalada.

La única salida razonable es cambiar el sistema (y toda la cultura de occidente) y empezar a aplicar soluciones ganar-ganar.

¿Seremos capaces antes de caer definitivamente en el abismo?

Unknown dijo ...

Fernando ¡ah! se me olvidaba... en nuestra economía tambien jugamos muy a menudo al arquetipo "ÉXITO PARA QUIEN TIENE ÉXITO" porque inexplicablemente sólo le damos valor a lo más escaso. ¿Es más valioso un kilo de oro que una orquidea?.¿Es más valioso un BMW que un paseo en otoño por un hayedo?.

Como decía Astérix "Estos romanos deben estar locos"

Lula Towanda dijo ...

Así es la economía, puro humo

Fernando García Pañeda dijo ...

Ahí está el quid. Los economistas clásicos solían utilizar el ejemplo del agua y los diamantes: es evidente que el agua es muchísimo más valiosa para los humanos que los diamantes, y sin embargo todos sabemos cuál es su "valor". Al final, son los poetas quienes dictaminan, como Machado, al decir que
Todo necio
confunde
valor y precio
.

Unknown dijo ...

Lula ¡si! es humo, pero por desgracia es muy a menudo humo tóxico y respirarlo es altamente dañino para la salud, sobre todo la mental.


Fernando lo malo es que se lee poca poesía.

vhonkhamy dijo ...

Esa es la llamada crisis de dinero circulante, pero, aunque parezca mentira, sólo es un síntoma de la crisis verdadera. A principios de año se intentó solucionar la actual crisis tratándola como una crisis de ese tipo y se inyectó dinero a los bancos, pero estos usaron el líquido para tapar sus agujeros sin darle circulación. Las empresas siguieron sin crédito y la crisis sin solución.
En España también se procedió a generar obra pública, así las empresas de construcción mayores pagaron su deuda y mantuvieron a sus contratas, evitando un aumento mayor del paro y una circulación de bajo nivel en el dinero. Permitió respirar a algunas familias (en especial de emigrantes) pero no solucionó el problema mayor).
La falta de liquido puntual hace que los problemas estructurales de cada economía afloren (en nuestro país fue el abuso inmobiliario), si en algún punto llega a apararse del todo la circulación de dinero ya no vale la inyección de este pues sera puntual y estará decantada en un sector únicamente.
En el ejemplo que propones no se observa ningún problema estructural y la inyección de dinero a permitido pagar a todos sus deudas. Una inyección de líquido salvaría la economía de ese pueblo. Pero ahora imagina que la puta tiene sífilis y se la ha contagiado a sus clientes. Estos, como ella, necesitarán acudir al médico y adquirir antibióticos. La deuda esta condenada a aumentar y la simple inyección de dinero ya no es suficiente, debe aumentarse progresivamente para pagar la salida hacia las farmaceuticas, pero es que, además, la puta se ha quedado en el paro pues mientras tenga y sea conocida su enfermedad no podrá ejercer. Esa es la economía real.