miércoles, mayo 24, 2006

Manajemén

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Ayer Julen escribió un brillante post sobre el lenguaje hueco, barroco y rimbombante que se usa tantas veces en los artículos de "manajemén".

Como le comentaba Nice, detrás de ese lenguaje se suele esconder la incompetencia y la ignorancia.

A los verdaderos genios se les entiende fácilmente. No necesitan esconderse detrás de un traje caro, una corbata o un lenguaje hueco.

Los que de verdad pueden aportar algo hablan espontáneamente porque el ego no les estorba.


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6 Comentarios:

LibertaCom dijo ...

Creo firmemente en la existencia de distintas tipologías de seres humanos que se van repitiendo a lo largo de la historia.
La tipología "sacerdote" en vista de que la religión no da los réditos que daba antes, se están adaptando a los nuevos tiempos. Antes llevaban sotana y ahora trajes, pero en lo fundamental siguen haciendo lo mismo: vivir de la nada y del trabajo de otros. Antes se valían de Dios y el infierno y ahora de la Pasta y el éxito... nada bajo el sol.

Nice Lazpita dijo ...

Es el eterno dilema entre el contenido y el continente. La forma tiene su importancia, pero sólo si existe contenido.

Lula Towanda dijo ...

Cuando se tiene algo que decir la sencillez y la claridad deben brillar para no perturbar el contenido. Como decía mi idolatrado Quevedo: lo bueno si breve, dos veces bueno.
Lo que más me fastidia es que además de plúmbeos son inmensamente largos esos bodrios del manajemén.
Podríamos instituir un premio del "O plasta máis grande do manajemén" seleccionando citas de los que van de gurús.

Fernando García Pañeda dijo ...

Eso del "gurureo" y el "ego-ísmo" es algo que ocurre en todos los órdenes. De hecho, algo parecido acabo de publicar en mi blog, en torno a la literatura.

CARMEN_R_PURAS dijo ...

Lula: No lo has podido expresar mejor.

¡Qué rollos dicen muchos de los gurús!

Unknown dijo ...

Gracias por vuestros comentarios.

Para ser coherente, hoy no me alargo más :)