El gato del gurú
Lo verdaderamente difícil es desaprender los métodos que hemos estado usando hasta ahora.
Todos los hábitos tienen su origen en lo que en el pasado fueron innovaciones. Estos hábitos tenían mucho sentido en su momento, pero al pasar el tiempo perdieron toda su funcionalidad y quedaron obsoletos.
El micro cuento “El Gato del Gurú” incluido en “El canto del pájaro” de Anthony de Mello, expresa magistralmente esta situación:
Una vez por día, al caer el sol, el gurú se reunía con sus discípulos y predicaba.
Un día, apareció en el ashram un hermoso gato que seguía al gurú por dondequiera que él fuera.
Resultó que cada vez que el gurú predicaba, el gato se paseaba permanentemente por entre los discípulos, distrayendo su atención de la charla del maestro. Por eso, un día, el maestro tomó la decisión de que cinco minutos antes de empezar cada charla, ataran al gato para que no interrumpiera.
Pasó el tiempo, hasta que un día el gurú murió. El discípulo más viejo se transformó en el nuevo guía espiritual del ashram. Cinco minutos antes de su primera prédica, mandó a atar al gato.
Sus ayudantes tardaron veinte minutos en encontrar al gato, para poder atarlo...
Pasó el tiempo, hasta que un día murió el gato.
El nuevo gurú mandó que consiguieran otro gato para poder atarlo.
3 Comentarios:
¿A ver si este post está relacionado con este otro? ;^)
en todas las organizaciones atan gatos, con o sin motivo.
El caso es dejar claro que quien se mueve no sale en la foto.
Informático impasible¿lo dices por el ascenso del gurú?.
Pilix muy buena frase. No la conocía.
Lula brillantemente expresado.
Haz un comentario